Nuestra estancia en Lanzarote, buceando con Océanos de Fuego, es decir, con Anna y Carlos, que han estado en todo, como siempre, ha sido increíble. En esta ocasión, a causa de la marea, no hemos podido visitar el Telamón (queda como deberes para el año que viene), pero hemos llegado a ser testigos del parto de un angelote, que no es cualquier cosa.
Como no todo va a ser buceo, Lanzarote nos ha obsequiado también con un concierto de Los Sabandeños, celebrando el día de Canarias. Absolutamente precioso.
Saltamos a La Graciosa, donde nuestros amigos del CB Archipiélago Chiniijo, capitaneados por Alberto, han hecho todo lo posible para que nos encontremos como en casa y de nuevo lo han conseguido. El buceo, las excursiones, las veladas nocturnas llenas de risas y canciones y el conocer a una gente que sólo piensa en agradar, hace que ya estemos contando el tiempo que nos resta para volver allí. Vaya aquí nuestro mayor agradecimiento a la familia Romero.
Gracias a tod@s por hacer posible esta semana
. No cambiéis nunca.